Una de las herencias más importantes que nos dejaron los romanos fue el trazado y construcción de las calzadas, tal como vimos esta semana en la presentación.
También hemos sabido que las mujeres no podían trabajar de muchas cosas en esa época, entre ellas de constructoras.
Pero nos ha dado un poco lo mismo ya que esta semana, en nuestro trabajo en equipo. todos y todas por igual hemos construido nuestra propia pequeña calzada.
Los materiales han sido diferentes a los usados en la época, pero le hemos puesto mucha ilusión.
Una primera capa de arena, o sea plastilina negra.
Una segunda capa de piedritas. Como sólo Guacimara trajo chinitos, y no teníamos bastantes, pusimos palos depresores.
Una tercera capa de arena, o sea plastilina amarilla.
Y una cuarta capa de losas para terminar con el bordillo y la calzada.
Sara nos trajo un montón de lositas preciosas.
Para terminar le pusimos un miliario de plastilina con un número 1 en romano.
Nos montamos encima para ver si era una calzada de verdad y...¡funcionaba!
¡Nos lo hemos pasado requetebien!
Y hemos aprendido un montón.
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